Ir al contenido principal

Una nueva propuesta al periodismo y a la sociedad

En el Centro Cultural Haroldo Conti (Ex ESMA) se llevó a cabo una charla sobre medios de comunicación y diversidad sexual a cargo de Carlos de Lorenzo y Marcelo Zelarrayán el 20 de abril a las 18.
El eje del debate fueron las posibilidades y perspectivas de un trato antidiscriminatorio en materia de género, práctica e identidad, tomando como base la nueva Ley de Comunicación Audiovisual. Se hizo hincapié en el rol del estado, y en la responsabilidad de los medios de comunicación y los periodistas que trabajan en ellos como transmisores de ideología. A modo de ejemplo, se expusieron tres casos de discriminación que salieron en los medios ya que uno terminó en asesinato y los otros dos en suicidios incentivados por las burlas y notas de medios gráficos en donde se resaltaba siempre la condición sexual de la victima. “Lo importante acá no es si el chico era gay o no, el problema es que lo mataron, ¿no debería ser diferente el titulo?” dijo Marcelo Zelarrayán refiriéndose a los titulares tras la muerte del joven chileno atacado por un grupo de neo-nazis.
 Los encargados de encabezar la charla son activistas de la diversidad desde diferentes posturas políticas e intentaron dar una visión más pluralista del enfoque de los medios sobre la realidad. Resaltaron que, a la hora de transmitir información, "es importante dejar de lado nuestras ideas, nuestros propios juicios para poder pararnos desde diferentes lados para dar la noticia".
 
(Nota vieja)

Comentarios

Entradas populares de este blog

Abrigo

Estabas de mal humor, no querías contarme porqué. Te regalé una canción desde el más profundo sentir que hablaba de ser humanos, de aceptar los dolores y naturalizarlos, dejarlos ser, permitirse el enojo, el llanto, la bronca porque son todas reacciones necesarias, que nos hacen reales, que nos invitan a descargarnos, que nos alivian. Y no tuve respuesta y me enojé yo porque un poco tenía ganas y porque otro poco era justo para mí hacerlo. Pero me callé y no te dije nada porque cargarte con más enojo, más bronca y más dolor ya no estaba en mis planes, esas eran cosas del pasado, un pasado en el que me gustaba, quizás, verte explotar y estallar de mil maneras para que me hirieras y tener motivos para alejarme, pero nunca lo logré, nunca tus filos endurecieron este amor que se siente tan desde adentro. Seguí mi día sin pensarte porque esa era la solución para aliviar el fuego que tenía en la garganta, festejé con amigos, me reí y olvidé tu silencio, que en mi mente era un desp

Celular

Estaba yendo al trabajo. Trabajaba a la mañana en una zapateria cerca de mi casa por lo que iba caminando. Eran como las 9.20 am. Eso me decía muchas cosas: que era hora de desayunar, que en diez minutos tenía que abrir el local y sobre todo, que Eugenio ya estaba despierto y en su trabajo. Caminaba y había sol, me acuerdo porque tengo esa relación de amor-odio con el Rey a la mañana. A veces me encanta cuando me da en la cara, siento el calor y se me achinan los ojos; hasta llego a sonreír solamente por eso. Pero otras veces, cuando es una mala mañana, el sol me da sueño, me fastidia y me arruina el día por completo. Eran buenos días, y el sol, pongámonos infantiles, era mi amigo. ¿En dónde estaba? si, cierto. Iba caminando con el sol en la cara. Saqué el celular para ver la hora y calcular cuanto tiempo me quedaba para llegar al trabajo. Vi que eran las 9.20 pero lo más me llamó la atención fue la fecha: 1 de junio. ¿Qué es el 1 de junio en mi vida? NADA. N A D A, absoluta

Sentirlo III

Dormí en la cama de mamá. Era sábado al mediodía, empezaba a despertarme. Había soñado con ella, que la veía cambiándose y se iba. No sé a donde pero se iba y eso me ponía muy mal. Me dí cuenta que la almohada estaba mojada, el sueño seguramente había sido muy real pero no podía recordarlo con exactitud. Abrí los ojos y la vi a mamá parada frente al espejo que hay en la puerta interna de su placard. Se estaba probando un pañuelo.  - ¿A dónde te vas? - le pregunté con la voz dormida - A lo de la tía - ¿Ya? - Si, es la una de la tarde Me dio indicaciones de la cena mientras me incorporaba en la cama, me saludó y se fue. Escuché la puerta y  me levanté para ir a cerrar con llave. Hace un tiempo ya que mamá volvió a hablar con una de sus hermanas. Crearon entre ellas una cita que respetan a menos que haya algún evento impostergable o Lucas o yo nos enfermemos. Todos los sábados ella viaja hasta la casa de Alicia y pasan el día juntas; después cenan, mamá duerme allá y vuelve